En este post te daré algunos consejos sobre cómo buscar prácticas o beca pensando en una carrera profesional a largo plazo. Y te aclararé la diferencia entre conceptos como: contrato en prácticas, contrato formativo y beca.
Buscar prácticas en empresa, una decisión importante
Para arrancar: Mi consejo es “no te conformes con cualquier cosa”. Es vital arrancar con buen pie en el mercado laboral, no te importe sacrificar algo más de tiempo hasta que llegue una buena opción. No tengas prisa, es preferible esperar un poco ahora que tomar un camino de poco recorrido.
El contexto actual, de falta de oportunidades, no es nuevo, mi generación también ha pasado por ahí, yo mismo he pasado por ahí. Por un lado sentía esas ganas locas por empezar a trabajar, por ser independiente, libre, por comerme el mundo, por triunfar, por tener una primera oportunidad donde fuera, por otro lado sentía presión, autoimpuesta, por empezar en algo, miedo aprendido (miedo que parece que, en España, llevamos dentro de los huesos) y que me hacía ser un buscador de mínimos, un buscador conformista, agradecido de cualquier oportunidad, con un pensamiento a corto plazo.
Pensaba que ere joven y tenía todo por delante, y es cierto que tendrás tiempo para equivocarte y rectificar, y siempre estarás a tiempo de tomar otro camino, pero cada vez se hace más complicado por el miedo del que te hablaba antes y el tiempo pasa como un meteorito. El futuro se construye con las decisiones del presente.
También pasa que al acabar una titulación no siempre se tiene claro qué camino seguir y es frecuente salir como pollo sin cabeza a la caza de una primera experiencia, así que párate a pensar, busca asesoramiento y comienza a preparar tu entrada en el mercado laboral con antelación. Lo primero de todo para buscar unas prácticas o beca es tener muy claros tus objetivos, “no hay viento favorable para quien no sabe dónde va, *Séneca”.
El objetivo de las prácticas es lanzar tu carrera profesional, no caigas en el error de tomar las prácticas como un simple paso para completar el programa formativo, coger algo de experiencia o simplemente por tener un pequeño ingreso de verano. No todas las prácticas o becas sirven para alcanzar tus objetivos profesionales, hay empresas mejores y peores, empresas que dan más prestigio, empresas donde se aprende más, empresas donde hay oportunidades de desarrollo. Y lo mismo ocurre con los sectores, hay sectores donde el potencial de crecimiento y de empleabilidad es más alto.
La clave está en pensar a largo plazo. Te parecerá una decisión pequeña comparada con las que vendrán en el futuro, pero no lo es, va a ser una decisión que va a marcar tu carrera profesional. Por todo esto te recomiendo que tomes tu tiempo, primero para pensar dónde te ves en una perspectiva de 2-3 años y después te diría que pensases en 5 años (aunque el mercado laboral es muy cambiante y nadie puede saber cómo estará a 5 años vista, al menos es un ejercicio que puede servirte de referencia). Se trata de que hagas un primer planning de cómo quieres que sea tu carrera profesional, una hoja de ruta en la que mirar cuando tengas que tomar una decisión (echa un vistazo al post en el que hablo de 10 tips para tener una carrera profesional coherente).
Las buenas oportunidades están ahí fuera, pero no siempre llegan cuando queremos, y no siempre tenemos el tiempo y los recursos para esperar. Si te lo puedes permitir clasifica las diferentes alternativas y tipologías de prácticas y márcate plazo para aceptar o rechazar. Si tienes problemas de recursos económicos y te ves obligado a aceptar una beca que no te interesa, no dejes de buscar prácticas que sí están en consonancia con tu planning de carrera.
Esto me lleva a otro punto que se suele valorarse mucho, es la remuneración. Lógicamente yo preferiría las prácticas remuneradas, la mayoría de las empresas, serias, las remuneran, pero no te fijes sólo en eso, no descartes por sistemas las becas no remuneradas, echa un vistazo y valora todo en su conjunto. Este es un tema polémico, así que haz lo que consideres que va con tus valores. Otro tema importante es que la empresa te garantice continuidad, es genial cuando la empresa te dice que hay posibilidades de continuidad, y así es, siempre y cuando estás en la empresa adecuada, pero puede ser una trampa si entras en una empresa que no puede ofrecerte un desarrollo profesional de calidad acorde a tu plan de carrera.
Investiga, toma tiempo para estudiar a perfiles senior que actualmente ya trabajan de lo que a ti te gustaría trabajar, anota patrones comunes: ¿Qué han estudiado? ¿En qué se han especializado? ¿Por dónde empezaron? ¿En qué tipo de empresas han estado? ¿Qué sectores?
Pregunta, estamos en la Era de la interrelación y de la conexión, todo estamos relacionados entre sí, tenemos acceso a contactar con muchísima gente, así que pregunta a estos profesionales, pídeles consejo, te sorprenderá lo accesible y amable que son las personas (también te puedes encontrar con algún “estreñido”, los menos, no pasa nada, en el mundo hay de todo, no es problema tuyo, sigue preguntando). Consigue que alguien sea tu mentor.
No te conformes con las ofertas que veas publicadas, busca tus propias oportunidades, sigue y ofrécete a las empresas que a ti te interesen. Participa en eventos, no te pares, se proactivo, persigue tus objetivos como si no hubiese un mañana, invierte tiempo en tu futuro.
Cómo prepararse para conseguir las practicas/beca
Cuando consigas una buena oportunidad para una beca interesante, pon toda la carne en el asador, investiga a la empresa para sacar información que puedas usar en tu favor, prepara un buen Currículum aunque no tengas experiencia, si no eres muy creativo busca una buena plantilla de CV que haga que destaques y llames la atención.
Para la entrevista prepara las respuestas a las preguntas frecuente, y recuerda que, sobre todo, se espera de ti actitud y entusiasmo estos son el ingrediente secreto en la entrevista.
Diferencia entre Beca, contrato en prácticas y contrato formativo
Beca (tanto remunerada como no remunerada). En una beca no hay relación contractual (no se rige por el Estatuto de los Trabajadores, no existe obligación de alta en la Seguridad Social, y cualquier otro derecho que tendría un trabajador normal) , se establece un convenio a 3 bandas, entre el becario, un centro formativo homologado y la empresa. Necesariamente la beca está asociada a formación por lo tanto siempre debe haber un centro formativo que, normalmente, establece las condiciones de la beca: plazo, duración, horas, remuneración, etc.
Contrato en prácticas. En el contrato en prácticas hay relación contractual y derechos derivados de esta. Está orientada a titulados universitario o de formación profesional de grado medio, superior o títulos oficialmente reconocidos como equivalentes o con certificado de profesionalidad. Las condiciones son que no hayan transcurrido más de 5 años, o de 7 en trabajadores discapacitados, desde la terminación de los estudios. Si el trabajador es menor de 30 años no se tiene en cuenta la fecha de terminación de los estudios. Hay alta en la seguridad social y contrato de trabajo con duración no inferior a seis meses ni más de dos años.
Contrato formativo o de aprendizaje: En el contrato en formativo hay relación contractual y derechos derivados de esta. Pero está orientado a un colectivo diferente: 16 y 25 años (menores de 30 años hasta que la tasa de desempleo se sitúe por debajo del 15%), sin límite de edad para personas con discapacidad y que no tengan cualificación para un contrato en prácticas.
Mínimo 1 año y máximo 3 años (Mínimo 6 meses por convenio colectivo). En esta modalidad de contrato, el primer año, el 75% del tiempo es de trabajo efectivo y el otro 25% se dedicará a la formación. Durante el segundo y tercer año los porcentajes pasan a un 85-15.